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1.
GEN ; 66(2): 76-80, jun. 2012. ilus, tab
Article in Spanish | LILACS | ID: lil-664206

ABSTRACT

El trasplante hepático es la única opción terapéutica de los pacientes con enfermedad hepática terminal. El trasplante de donante cadavérico es menos probable en nuestro país. Por esto se desarrolló el programa de trasplante hepático de donante vivo desde el año 2005 en nuestro país. Se revisaron las historias de 39 donantes. Cada donante fue sometido al protocolo de evaluación pretrasplante incluyendo, laboratorio, angiotomografía, colangioresonancia, evaluación psiquiátrica, social y biopsia hepática de ser necesaria. Incluimos 39 individuos entre 18 y 52 años. Solo 9 donantes presentaron complicaciones: 4 colecciones intraabdominales, 4 infecciones de la herida, 2 fístulas biliares, 1 endocarditis, 1 enterocolitis y 1 ameritó reintervención por colección intraabdominal. No se registró mortalidad. Se realizaron 17 hepatectomías laterales izquierdas, 15 izquierdas, y 7 derechas. Posterior a 3 meses los donantes tenían el mismo volumen hepático previo a la donación. Todos están en condiciones físicas satisfactorias y regresaron a sus actividades cotidianas entre 1 y 3 meses después de la donación. La evolución de todos los donantes fue satisfactoria lográndose la reincorporación a sus actividades habituales en corto plazo. El trasplante hepático de donante vivo relacionado es un procedimiento seguro para los donantes


Liver transplantation is the only therapeutic option for patients with end stage liver disease. Liver transplantation from cadaveric donors is less probable in our country. For all this the living donor liver transplantation program was developed in our country since 2005. The medical histories of 39 donors were reviewed. Each donor underwent the pretransplant evaluation protocol that includes laboratory, angioTAC, colangioMRI, psychiatric, social evaluation and hepatic biopsy if necesary. We included 39 individuals with ages between 18 and 52 years. Only 9 donors developed complications: 4 intraabdominal collections, 4 wound infections, 2 biliary fistulae, 1 endocarditis, 1 enterocolitis, and 1 patient needed surgery for an intrabdominal collection. No mortality has been registered. 17 left lateral, 15 left and 7 right hepatectomies were done. After 3 months the donors had the same hepatic volume prior to donation surgery. They are all in excellent physical conditions and have returned to their daily activities within a period between 1 and 3 months after donation. The outcome of each donor was satisfactory being able to return to their daily activities in a short term. Living donor liver transplantation is a safe procedure for donors and constitutes an alternative for our patients that need hepatic transplantation


Subject(s)
Female , Young Adult , Donor Selection , End Stage Liver Disease/surgery , Liver Transplantation , Gastroenterology
2.
GEN ; 62(1): 14-16, mar. 2008. tab
Article in Spanish | LILACS | ID: lil-664309

ABSTRACT

Introducción y objetivos: el transplante hepático es uno de los tratamientos adecuados en pacientes pediátricos con enfermedades hepáticas en fase terminal. El objetivo del presente trabajo es presentar la experiencia preliminar del programa de transplante hepático pediátrico llevada a cabo en nuestro país. Pacientes y métodos: se incluyeron niños que fueron evaluados en la consulta de pretransplante pediátrico del programa metropolitano de transplante por presentar enfermedades hepáticas en fase terminal Resultados: se incluyeron pacientes a los que se les realizó transplante hepático entre abril de 2005 y marzo de 2007; 9 pacientes en edades comprendidas entre 5 años y 15 años, 3 del sexo masculino y 6 del sexo femenino. Todos los pacientes presentaban serología para CMV positiva previo al transplante y 5 presentaban serología positiva para EBV previa al transplante. Todos los individuos tenían una calificación PELD entre 9 y 17. La enfermedad hepática crónica que los llevó a la necesidad de realizarles transplante hepático incluyó los siguientes diagnósticos: atresia de vías biliares extrahepáticas4, colestasis intrahepática familiar progresiva² y hepatitis autoinmune¹, hepatocarcinoma¹ y fibrosis hepática congénita¹. A 7 de los pacientes se les realizó transplante hepático de donante vivo, 1 de donante cadavérico y 1 autotransplante. El tiempo de estadía en terapia intensiva fue de 11 a 30 días, y el tiempo posterior en hospitalización fue de 3 a 15 días. El esquema de inmunosupresión inicial fue ciclosporina, prednisona, micofenolato a 4 pacientes y 5 tacrolimus y prednisona. Dos pacientes presentaron rechazo agudo el cual fue tratado con bolus de esteroides por 3 días con resolución completa de la disfunción del injerto. Todos los pacientes presentaron complicaciones infecciosas en los primeros 6 meses del postransplante, entre ellas: 4 pacientes infecciones urinarias documentadas por urocultivo por Proteus Mirabilis 2 y E. Coli 2, 5 pacientes presentaron infecciones por CMV a los cuales se les administró valganciclovir por vía oral obteniendo una respuesta adecuada. Dos de los pacientes presentaron complicaciones neurológicas, 1 presentó convulsiones tónico clónicas generalizadas sin déficit neurológico, se le realizó TAC y EEG los cuales resultaron normales con niveles elevados de ciclosporina y niveles bajos de magnesio que fueron corregidos. Un paciente presentó alucinaciones, se le realizó TAC cerebral y EEG normal, recibió haloperidol durante un período de 3 meses, con evolución satisfactoria. Uno de los pacientes presentó complicación biliar a los 9 meses postransplante, demostrada por ecografía abdominal y colangioresonancia (estenosis de la vía biliar), se colocó prótesis biliar con mejoría completa del funcionalismo hepático. Un paciente con síndrome hepatopulmonar previo al transplante, amerito para su corrección final, después del trasplante de tratamiento endovascular del shunt AV, arteria pulmonar lóbulo inferior izquierdo con colocación de espirales de titanium con resolución de la hipoxemia persistente. Posteriormente, ese mismo paciente presentó vasoespasmo de la arteria hepática documentado por perdida del registro arterial durante evaluación doppler y acompañado de elevación de las aminotranferasas recibiendo tratamiento con nitroglicerina intrarterial y colocación de stent con mejoría completa del funcionalismo hepático. La sobrevida del injerto y de los pacientes es en la actualidad de un 100%. Conclusión: el transplante hepático constituye hoy en día en Venezuela una posibilidad terapéutica para los pacientes pediátricos con enfermedad hepática terminal, progresiva e irreversible, que no está exento de complicaciones pero que al ser diagnosticadas y tratadas a tiempo, alcanza un 100% de sobrevida tanto del injerto como de los pacientes.


Introduction and Objectives: Liver transplantation is the treatment of choice for pediatrics patients that suffer end stage liver disease (ESLD). The goal of this essay is to introduce the first national experience with the modality of liver pediatric transplantation programs in the treatment of ESLD in pediatrics patients. Patients and Methods: 9 children suffering ESLD and their respective donors were seen between April 2005 and May 2007, each patient and its donor underwent a complete transplant evaluation (cardiac, respiratory, renal evaluation, imaging studies, and blood work up) to determine their candidate for either liver transplant recipient, or liver donor. RESULTS: 9 patients in ages between 5 years and 15 years, 3 male and 6 were included. All the patients had positive serology for CMV before transplant and 5 had positive serology for EBV before transplant. All the patients had score PELD 9 and 17. Diagnoses of the recipients were as follow: 4 Atresias of extrahepatic biliary tract, 2 progressive familiar intrahepatic cholestasis, 1 autoimmune hepatitis, 1 congenital fibrosis and 1 hepatocarcinoma. 7 live donor liver transplants, 1 deceased donor and 1 autologous liver transplant were performed. Operative mortality was 0%. Patient and graft survival were 100% at 1 and 2 years follow up. Patients presented various complications that included: acute rejection, CMV infection, acute urinary tract infections, hepatic artery spasm, and seizures among others. All the previous mentioned complications were successfully treated. Conclusion: Liver transplant constitutes the best option for the patient with ESLD, early referral is critical in the outcome of pediatric patients that need liver transplant.

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